martes, 18 de noviembre de 2008

PALABRAS DEL ALMA N.27: POESÍA "Lágrimas de Amor sembradas en un papel"

.
Te amo…

Amo cada instante que paso contigo;
amo cada sonrisa que me dejas sentir;
amo cada mirada que me pierde;
amo cada centímetro de tu piel juvenil.

Amo tus labios que me hacen temblar;
amo tus ojos que el cielo me dan;
amo tus momentos de risa y enojo;
amo tus caricias que no he de gozar.

Amo tu nobleza sin par;
amo tu humildad que me hace pensar;
amo tu pasión al momento de actuar;
amo tu belleza que me llega a extasiar.

Amo la dulzura que despide tu ser;
amo la sensación de llegarte a querer;
amo la tristeza de no poderte amar;
amo la armonía que me haces desear.

Amo el deseo de tenerte entre mis brazos;
amo el porvenir que pudiera tener junto a ti;
amo el sueño donde te poseo sin fin;
amo el delirio que es vivir por y para ti.

Amo este sueño, inútil quimera;
amo el cielo y el infierno que se desatan en mí;
amo el haberte conocido;
amo el sentimiento de amarte así.


Pienso en ti…

Recorro el valle de tus anécdotas aquel remanso de tus dulzuras, recuerdo el cariño de tus palabras, aquel acento de tu voz, en la brisa me miro dentro de un lago azul y me doy cuenta ¡que te extraño! Solo así pasa el tiempo eterno en aquel mustio alejamiento.

Pienso en lo que dejas en mí en aquello que no te dejo ver, en eso que no te digo cuando te miro, en aquello que oculto tras las bromas, me miras...

Y todo queda en ilusiones, como si me escribieras un cuento de ti o como si te atrapará en una lámpara y bailamos en una bóveda de cristal…

En aquellos instantes de soledad pienso en ti... Aunque no te vea, aunque no estés, las fotografías tuyas en mi cerebro revoloteando como mariposas; cada minuto es una situación candente que me aísla de la realidad y me conecta con tu pensamiento.

Pienso en ti, aunque no me creas, aunque digas que no es cierto, aunque pienses que te miento.

Solo aprendí a verte de lejos y contemplarte cerca de mí... Sin poder abrazarte...

¡No te miento!

Solo que te quiero, por eso estoy ausente de ti y me pierdo en lo que callas, descubro algo entorpecido por las horas que no nos hablamos. ¿Sabes?, en la rutina de cada día he pensado en ti...

He visto mis ilusiones tocarte, hasta he sentido que me llamas cuando en un salón me encuentro, la música hace énfasis en mis oídos y me hundo en la mística poesía solo para verte volar en las nubes llevándote mi corazón con tus alas.

No sé lo que llevas dentro…

Un misterio vehemente; solo me perdí en tus cosas tiernas en esa sensación de amor frágil o tal vez en un temor que no defino bien, quizás solo me equivoco cuando te escribo, tal vez entiendes esto extraño en mí, pero no dices nada...

Tu silencio simple como este loco amor por ti.

Pienso en ti y lo sabes, cada mañana, cada tarde, te sueño, a veces en mis frustraciones en el léxico de lo profundo, el letargo, lo que envuelve al alma y la lleva al mundo de las cosas volátiles.

Te pienso al cenit del sol... Al crepúsculo, en el horizonte...

Entiendo lo que es y lo que imagino, como cataratas son tus frases en mí, como turbulencia en el agua de un río, parece la circulación de nuestra sangre, ahí llevas mi corazón en tus manos como para estrujarlo junto a tu pecho, sintiendo uno solo al mismo tiempo, yo en ti, tú en mí, los dos en uno, solo que separados por nuestros cuerpos.

Déjame entrar en tu mundo medieval y conquistar tu corazón y el mío, déjame que me pierda en el amor tuyo, arrúllame en tus brazos y dormiré en tu regazo como niño, déjame besar tus labios voluptuosos y penetrar en los rincones de tu universo, déjame sondear tus fragmentos desde adentro y elevarme en tu arco iris hasta el cielo.

Solo déjame pensar en ti y no me digas que no, ¡por favor!...

Encuentro en ti ese detalle que me haría feliz...


Miedo a perderte…

El miedo me opaca en mis palabras cortas, en versos humildes que fluyen de mi boca, miedo al adiós inesperado, miedo a sentir que el cielo se nubla y el fin ha llegado...

Sin mentirte diría, que temo perderte por la gracia de Dios, por ser divina, te hace ser a todas, muy diferente.

Miedo a cerrar los ojos efímeramente, parpadear en el silencio.

Y escuchar a mi corazón bombear el sentimiento, sentir que mi alma te aclama, pide que estés a mi lado, mi mente esta concentrada en ti, y mis palabras resuenan en el viento.

Mis manos me apoyan, escriben lentamente, es lo que deseo, escribir con parsimonia y a la vez mostrar el amor, aquella fructífera suerte, que ha hecho que llegaras a mí hoy sigue aquí.

Me sumerge en un mundo fantasioso donde lo real es dudoso, y la fantasía muy cierta donde amarte es mi verdad, donde no quisiera cambiar nada, donde tan solo quisiera mejorarla en cada punto para amarte cada vez más, es lo que deseo de corazón.

Y jamás me cansaría de escribir tantas cosas para ti.

Puedo relatarte cada pasión mía, puedo relatarte el pulso acelerado y pausado que causas en mí. Puedo narrarte mi imaginación, lo que cree en mi mente pero siempre tendrían el mismo objetivo...

Decirte que te amo, que quiero estar por siempre a tu lado. Escuché que jurar es malo wow...

Entonces ¿qué puedo decirte? entonces prometo no dejarte de lado, entonces prometo amarte aunque el cielo este gris, prometo amarte porque yo daría todo por ti, porque las cosas son inciertas cuando tu voz no las afirma, porque tus palabras me llenan de deseos, porque vivo enamorado de tu forma de ser, de tu hermosura, de tu alegría.

Y si me preguntases, "¿qué es lo que más te desearía dar?" yo respondería: "quisiera poder brindarte, amor hasta el final".


Tu recuerdo…

He despertado con ganas inmensas de abrazarte,
con las manos llenas de besos,
con los ojos cargados de sueños,
con palabras nuevas que unidas son versos
que para ti son hechos en lo sencillo de mi arte.

He corrido por las calles intentando encontrarte,
con los labios ahogados,
en lo frágil de este pecho aprisionado,
a la espera de este tiempo que me ha dejado
la sonrisa tenue de tu mirada amante.

Hoy, en mi soledad absurda,
no estoy sólo:
Me refugio en tu pensamiento y me conformo,
con saber que en esta tarde,
en este abril de locos,
tu memoria es mía
y tu alma mi más preciado tesoro.

He llegado al sitio que con locura descargaste
sobre mi alma calcina y destemplada
una frase en carne enamorada,
una caricia sobre mi piel amortajada,
cuando yo giraba en frases que querían enamorarte.

He regresado al lugar donde puedo respirarte,
con mi andar desangrado,
y mi sonar desesperado,
en una noche fría que ha dejado
el retorno del alba y mi costumbre de extrañarte.


Nos hemos dejado…

No quiero pensar más y sin embargo pienso,
que dejamos volar aquello que construimos durante tantas primaveras
cuando los almendros florecían y las rosas resplandecían,
hermosas, perfumadas, lozanas...

Que dejamos marchitar lo que durante tantos inviernos
de frío cálido y noches incesantes de abrigo construimos,
cuando las tormentas agitaban nuestro corazón
entero, pleno, enamorado...

Que dejamos todo olvidado un frío verano,
en el que los rayos de sol semejaban afiladas agujas sobre mi piel,
y el vaivén de las olas del mar como fantasmas del eco de un final,
triste, angustioso, anunciado...

Nos hemos abandonado cariño,
y no quiero, no quiero sentirme perdido tan lejos de ti,
no quiero pensar más y sin embargo pienso,
nos buscamos perdidamente, pero no te encuentro,
demasiada niebla en el camino, se nos está viniendo el olvido, amor mío,
se nos está viniendo.

No quiero pensar más y sin embargo pienso,
pienso que nos hemos tenido y ahora al mirarnos nos decimos:
nos hemos abandonado cariño,
y una lágrima recorre nuestra mejilla como trazando el camino
que nos conduce a la soledad que nos evoca este desamor sin sentido...


Deseo…

Vivo con la ilusión de al fin tu rostro conocer, sé que al igual que yo, tú esperas por mi que la noche se convierta en día junto a ti.

De vivir un idilio de amor, te tatuarás en mi piel, me grabaré en tu corazón, navegaré los siete mares sólo por ti, sabrás al igual que yo, que juntos lo conquistamos todo, solos nos hundiremos en la soledad, cada día será un desafío volver a conquistarte...

Tejeremos sueños de alborada. Y cada alborada será una lucha a muerte, lucharás por hacerme sentir mujer, lucharé por hacerte sentir amado, y en una lucha de mutuo acuerdo, exploraré cada parte de tu cuerpo pasaré cada frontera de él.

Al llegar a la cima, izaré una bandera con mi amor. Probaré de tu néctar, te embriagarás con el mío. Estando al borde de la locura empezará una guerra cruel, lloverá dulce en los valles del amor...

Tu naturaleza limpiará mi cuerpo, irás despacio, suave, ardiendo en el deseo, querrás llegar al final del juego. Plantar tu bandera de amor, seré yo quien sacie tu sed de afecto y serás tú mi postre predilecto, al final de la batalla, convertidos en un solo cuerpo y al final del juego quedará la duda si es deseo, necesidad o dependencia de un pasión etérea por el otro.

Y es que amarte a ti, es deleitarme con tu voz al escuchar el verbo amar.


Descubrí…

Descubrí que hay un portal que nos separa de la realidad, descubrí que existe un umbral donde se mezclan mil emociones, donde se mezclan innumerables sensaciones, donde se mezclan la ansiedad con la paciencia, la tristeza con la alegría, la cordura con la locura y la calma con el éxtasis.

Descubrí que existe un mundo en el que solo sobreviven dos almas, dos corazones que se fusionan y transforman sus latidos en un solo sentir. Descubrí que mi piel es moldeable ya que se vuelve parte de la tuya.

Entré a explorar nuevos horizontes, horizontes inhóspitos, donde descubrí que la verdad sabe a mentira y donde todo sabe a nada, descubrí que dos almas pueden enlazarse en un instante lleno de magia.

Descubrí que después de haber tocado tus manos, después de haber besado tu boca, después de haber sentido tu piel, después de haber probado tu sexo... No hay nada más... Traspasé ese umbral contigo...ahora nunca nada será igual amor mío.


Insensible emoción…

Fue esa gota de lluvia la que faltó
para poder despedirme a tiempo,
y el eco de tu presencia el que saltó
al abismo de tu despedida en el viento... Amandonos.

...Y amando maté mil sonrisas con gotas de sal,
gotas, que luego sequé con la cintura de tus labios,
simples, sin tintes de amor, reclamaron el final
besos que pregonaban un dolor innecesario...

Y pensé que haber muerto, era mejor que haber amado...
...Y abajo, dejé pasos sin huellas
en el camino de tu memoria,
encontrando una mente sin recuerdos
sentada a orillas del mar del tiempo,
¿pensando?, ¡No!, ¡Llorando!
deshaciéndose de los recuerdos
en cada lágrima que recorría su rostro,
en cada lágrima que se esfumaba de su cuerpo, de mis ojos...

...Los reflejos de mi alma pudieron percibir
tu presencia, la esperanza , que inundaba mi existir.
¿Y la tristeza?,
¿Quedó olvidada?
¿O esperando su momento en la parada del tiempo?...

Porque lejos, en el tiempo estás...
lejos de ser verdad,
porque lejos estuviste...
inventando una realidad,
y así te convertiste:
En alguien que ya no existe,
en alguien que ya no está.

Y tu ausencia amalgamada
con la pena y el dolor
solo evocan un recuerdo
que de mí, ya se esfumó.

Mientras, seguiremos cantando penas a orillas del mar
confundiendo nuestro llanto con gotas de sal...
y en noches como estas cuando llueva y me sienta así,
será inevitable no acordarme de ti;
se te extraña a veces... Y a veces
también se te quiere olvidar,
pero quien le dice al corazón a quien querer
o a quién amar.

Ahora, mi silencio elocuente me hace mirar a ciegas
las posibilidades inexistentes
de amalgamarme con tu esencia,
y si son mis sentimientos relativos a la estación...
¿estaré triste o contenta hoy?...
Experimentando este dolor... Y felicidad...
O simplemente viviendo... Con esta insensible emoción.


Te amé…

Me peleé con mis manos para no escribirte, le dejé de hablar a mi corazón hasta que te olvidara. Les ordené a mis pies que siguieran caminando. Cubrí mis ojos para que no lloraran, tapé mis oídos para no escucharte. Conversé con Dios rogándole que te borre de mi piel. Le pedí de rodillas que me enviase otra persona.

Tuve una intensa charla con el silencio, me explicó tantas cosas que con palabras nunca llegué a entender. Tú tenías a otra, precisamente a ella, que tanto te podía entender, que caminaba junto a ti, y yo caminaba sola. Pero tanto era el amor que te tenía, que simplemente te deseaba felicidad, felicidad al extremo, felicidad con locura.

Te amé tanto que vi, mi mundo derrumbarse el día de tu partida y te mostré una sonrisa ofreciéndote mi amistad sincera. Te amé tanto que te esperaría la vida entera si decidieses regresar. Te amé tanto que perdonaba tu impaciencia, tu falta de amor, tu rechazo y tu frialdad.

Te amé tanto que me convertí en una masoquista con tal de tenerte cerca. Te amé tanto que fingí estar bien para que nunca te sintieses culpable. Me dices que eso no es amor, desde cuándo le cambiaste el significado… Dime... Desde ¿cuándo?


Gracias…

Al transitar en el camino formado por el abismo de mi soledad, yo hacia muchas cosas, cosas como reír o llorar, cantar y pensar, en ocasiones yo era feliz, pero la mayoría de las veces era triste, y muy raras veces odiaba, muchas yo hacia, muchas cosas sabias, acepto una, ¿Qué es el amor? ¿Qué significa amar a alguien?

Por un tiempo seguí con esa interrogante en mi mente, mientras caminaba por este camino encontré muchas cosas, encontré mucha gente, encontré amigos, pero aún no encontraba respuesta a mi pregunta, ¿qué es amar?

Siguiendo por mi camino me encontré con un jardín, uno lleno de rosas, rosas de todo tipo, tamaño, colores y formas, al ver esto, decidí entrar, me acerque aun un jardinero, que se veía que las cuidaba con esmero, al acercarme, él me dijo, “te estaba esperando, entra y busca tu rosa”… No entendí, ¿Cómo que mi rosa? ¿Cómo que la busque?

¿Cómo sé cual es mía? ¿Y como sabe quien soy? Dejé a un lado mis interrogantes y decidí hacer caso, y comencé mi búsqueda, busqué y busqué, tomé una rosa grande, pero la solté, pues tenía espinas, busqué y busqué, tomé una rosa chica, no duro mucho, pues estaba machita, busqué y busqué, y tomé una rosa hermosa, me alegré pues no tenía espinas y mucho menos estaba marchita, pero… Su dueño llegó y me la arrebató, busqué y busqué y nada.

Al final del día, cansado, desanimado, y fatigado, caí al suelo, justo en ese momento un hermoso perfume llegó a mi olfato, quedé cautivado, ese olor agradaba, relajaba, embriagaba, ese olor me dejó sin palabras, enseguida busqué el origen de ese aroma, y vi una rosa, una rosa única, su color, su perfume, su tamaño, era diferente de todas, era indescriptible, la tomé entre mis bruscas manos tratando de no maltratarla, y algo sucedió, pero… ¿Qué era ese algo? No tenía respuesta.

Enseguida, dentro de mí, algo me impidió dejarla, me obligo a cuidarla, a protegerla, hizo muchas cosas, cosas que nunca había sentido, que no había conocido, pero… ¡A que maldito pero!, no había terminado con mi camino, tenia que seguir, y no podía llevarme esa rosa, sus raíces no me lo permitían, no la dejaban, la tuve que dejar, abandonar, me dolió mucho, aun me sigue doliendo, no sé si volveré a tenerla en mis manos, si volveré a cuidarla, a respirar su rico aroma, a protegerla.

Hoy solo doy las gracias a esa rosa, a esa mi rosa, pues ella dio respuesta a mi interrogante, pues ella hizo que existiera lo que para mí era un misterio, en pocas palabras te doy gracias a ti KEAM, a ti que me diste esa oportunidad, gracias cabrachica por enseñarme lo que es amar.


Solo por hoy...

Solo por hoy te entregaré mi alma,
mi corazón, mis sentimientos y mi esencia;
solo por hoy me harás perder la calma,
solo hoy me cautivará tu presencia.

Solo por hoy quiero probar la miel de tu boca,
saciarme de tus besos entre tus brazos;
solo por hoy verás lo que tu belleza me provoca,
solo hoy saldrá un te amo de mis labios.

Solo por hoy compartiré mis secretos contigo,
te contaré cosas que a nadie he contado;
solo por hoy quiero que duermas conmigo,
solo hoy quiero que despiertes a mi lado.

Solo por hoy quiero entregarte mis cinco sentidos,
acariciar tu cuerpo y disfrutar el aroma de tu piel;
solo por hoy quiero besarte y escuchar tus latidos,
solo hoy admiraré tu belleza como un testigo fiel.

Solo por hoy quiero ser tu compañero,
cómplice de aventuras y nuevas emociones;
solo por hoy escucharas cuanto te quiero,
solo hoy quiero unir nuestros corazones.

Solo por hoy quiero pasar mi vida a tu lado,
disfrutar y sufrir juntos eternamente;
solo por hoy quiero sentirme enamorado,
solo hoy quiero llevarte en mi mente.

Solo por hoy podré decirte lo que siento,
mis palabras son sinceras y mi vida te doy;
solo por hoy sabrás que estoy contento,
solo hoy le pediré a Dios que todos los días sean como hoy.


Por un beso…

Por un beso de tus labios, viajaría a las estrellas, olvidando mi miedo a las alturas entregándome a lo sublime de lo terrenal y lo divino.

Por un solo beso de tus labios, entregaría mi corazón a la peor de las malhechoras, sin importar lo destrozase en un segundo.

Por un beso de tus labios, olvidaría mi pasado y comenzaría a vivir mi presente a tu lado.

Por un beso de tus labios, me arriesgaría amar tus imperfecciones, me quemaría en el infierno más hermoso que jamás ha existido.

Por un beso de tus labios, cruzaría el cielo y volaría en el mar, me transformaría en el villano más patético del cuento de hadas.

Por un beso cariño mío… Un beso de tus labios, escaparía de mi mundo y me acomodaría a vivir en el tuyo.

Por un beso de tus labios, probaría lo eterno, saltaría a la tierra hasta llegar a tu suelo, llegaría a amar cada gota de lluvia que cae y llena el abismo que nos separa.

Por un beso, cambiaría mi nombre y te robaría hasta el último y más pecaminoso suspiro puro.

Por un beso de tus labios, me arrancaría la piel para quedar desnudo ante ti, te abriría mi pecho y haría una abertura a mi espalda y así vieras que hay un corazón muriendo de ganas por un simple beso de tus labios.

Por un beso de tus labios, amor mío recorrería tu piel y no dejara rastros de mí en ti, dejaría que conquistaras cada parte de mí, te permitiría abrir mi pecho y mi espalda para que te apoderes de mi diminuto corazón.

Por un beso de tus labios me escondería en tu ventana para verte dormir; entraría a tus sueños para verificar si en ellos aparezco; para ver si soy dueño de tu alma y corazón…


Muero…

Que el corazón me duele... la piel me quema... mi virilidad se debate en este país yermo de amor... oscuro... ausente de caricias...
Y en mis manos fenecen las caricias mustias del pecado...
Y maldigo mi nombre!
Y mis lágrimas ahogan esta ira del desamor...
Y mi ira desgarra este estúpido corazón...
Y en este corazón se resguarda mi última esperanza de amor y de deseo...
Y qué he de ser ahora, sin más esperanza?
Y a dónde he de volver mi mirada?
Dónde he de encontrar lo que ya no existe?
Y maldigo mi nombre!
Y desprecio mi destino...
Que sin ti, dueña mía, no existe el futuro.
Mi persona se desfigura...
Mi sino se desvanece...
No soy nada sin tí...
Y maldigo mi nombre...
Que yo soy Ángel de la Soledad!
Las lágrimas ya queman mis mejillas...
Y me duele...
Me duele el corazón...
Y se me escapa el alma...
Y mi cuerpo se consume...
Por qué tú? Por qué entonces? Por qué fue así?
Aún te amo...
Aún me dueles...
Y aún sigo buscando ser otro
Aquel que fui junto a tí...
Pero no puedo más…
Me derrumbo...
Sufro, lloro... muero por ti, para tí... sin tí... muero!!!
Solo deseo que tanto dolor te de alegría a tí... amada mía...
Adiós.

Atentamente,Ángel de la Soledad.


Finalmente voy a atreverme de incluir la poesía de un gran amigo mío, escritor al igual que yo y que en el momento de tomar la pluma y escribir entra como un huracán en los rincones más sensibles y profundos de nosotros dándole un matiz de familiaridad a su poesía…les presento las letras de Franco Muzzio…


Porque se me antoja mirarte a través de la noche…

La respiración la tomo con los ojos cerrados para recordarte,
el humo ajeno no se parece en nada al tuyo,
en el teclado hay letras que hablan
y que escriben sobre ti,
de manera tan rápida como lo hace el viento.

Llegar dentro de la madrugada
y ver que ella escondió tu tiempo es algo que detesto
a pesar que cuando se trata de ti
los semáforos no existen,
siempre tu risa se duerme
Entre la tontera del reality de moda.

Tu mano abierta sujeta un montón de aire
y tus dedos casi besan el universo de la alfombra.
siento tu olor en las sabanas
tu programa se acabó hace rato
y son las noticias quienes dibujan luces en tu rostro
(no me gusta ver la realidad a través del noticiero
prefiero la opinión pública de tus ojos silenciosos).

El control remoto carga cientos de canales;
nada interesante que ver en esa caja
nada que se compare con meterme entre tus labios
y sacar una sonrisa que me ayude
cuando la rutina es un pan duro
que no se traga con aire y con tazas de café.

Hoy los satélites están perdidos en las nubes,
hoy es un día seleccionado para mirarte
y olvidar por un minuto las cruces que trajo el día.

Quizás despiertes cuando tengas sed
y diré que había ruidos raros en la calle
o que el insomnio no mostraba carta de renuncia.

Pero ahora estás con la boca abierta
respiras olor de zapatos y escalofríos de ventanas,
(solamente cuando estás dormida,
se me ocurre decirte que te amo tantas veces).

El perro del frente llena de ladridos
a personas que no le conocemos la piel,
mientras el nuestro duerme igual que tú,
con el sueño desparramado quizás por donde.

Afuera el día bosteza temprano,
los pájaros despiertan a los panaderos,
las micros comienzan a dar vueltas
y nuestros relojes nos gritan por dentro de los ojos.



BUENAS NOCHES A TODOS…

PALABRAS DEL ALMA N.26: POESÍA "Expresión del Alma, un grito de amor en la noche de la Vida"

.
Tú mi recuerdo...

Piensas...
¿Piensas en mí?
puedo verte caer,
sintiendo tu miedo,
tu voz fría palpita, raspa, quema.

¡Ya!... ¡Por favor ya!
¡Deja de sentirme!
Deja de mirarme, de pensar que para ti
yo soy la luna y tú la tierra.

Pisando las hojas viejas
de un pasado que alguna vez
escribimos los dos juntos
como una sola alma, ahora
solo me queda decir...

Viendo como mi voz adelgaza
ante tu presencia
puedo sentir tu propio miedo,
el mismo que sentí cuando
me di cuenta de que no me amabas.

Pasamos de frente
al sol, al mar, a la nada
a aquella banca caída después de tantos
días en los cuales nos vio ser felices,
frente aquel sendero que nos vio caminar...
pasamos frente a frente sin decir nada.


¿Sabes amiga?...

"¿Sabes amiga?
tengo algo, que contarte
hace poco conocí el amor
y no se, si tú lo sabes
me lo enseñaron tus ojos
tu risa, y tus palabras suaves.

¿Sabes amiga?
que yo te sueño
que estoy lleno de recuerdos
en mis momentos, te tengo
no, tú no lo sabes
ni te imaginas siquiera
que se nublan mis ojos
tan solo al nombrarte.
A veces siento amiga
que te quiero
como nunca antes
y quisiera ir a contarte
pero, tengo que retener
mis ansias soy tu amigo,
aunque nací para AMARTE"...


Te estaré esperando…

No borraré el dulce sabor de tus besos
y tus caricias de mi cuerpo.

¡No me pidas eso!
No me pidas que te olvide, porque no quiero,
no me pidas que no te ame, porque no puedo.

No me digas que vas a marcharte
no tienes que hacerlo.

Si vas a irte, vete,
pero, no me digas que te estoy perdiendo.

No me asesines de esa manera,
déjame vivir con tu recuerdo,
vete tranquila y no digas nada.

De verdad, no es necesario yo te comprendo
y porque te amo, te permito hacerlo.

Vete, vete sin remordimientos,
por mí no te preocupes
sabré mantenerme vivo soñando tu regreso
y cuando estés lejos...

¡Cuando no halles otros labios como los míos
incansables de besarte!

¡Cuando comprendas que tú y yo somos uno,
que nos pertenecemos!

¡Cuando comprendas que nadie como yo
podrá amarte ni te ha amado!

Cuando la cruz de la tristeza
empiece a doblegarte el alma

¡Regresa amor mío!

Que amándote igual o más que el primer día.

¡Con los brazos abiertos…te estaré esperando!


¡Olvidé decírtelo!...

Amor:

Esta carta es una carta que ningún hombre desearía escribir, pero tengo bastante suerte al tener tiempo para expresar lo que he olvidado decir muchas veces.

Te amo…

Solías decir que amaba más al trabajo que a ti, porque pasaba más tiempo en él. Amo este negocio, pues ha sido bueno conmigo, me ha acompañado en mis ratos de soledad y en momentos difíciles…siempre he podido contar con él. Nunca me falla.

¿Deseas saber algo? Te amo por los mismos motivos. Me has acompañado en los momentos difíciles y en los lugares intrincados.

¿Recuerdas la primera salida? Ese día que comimos y platicamos por primera vez de nosotros y la forma en como dos extraños se conocían. Recuerdo la cena, recuerdo que no te comiste todo, pero lo que mas recuerdo es tu sonrisa.

Recuerdo que me lamentaba del trabajo, de la jefatura, pero no recuerdo que alguna vez te hayas quejado cuando llegabas a casa cansada del trabajo, cuidar a tus niños y tener que esperarme hasta altas horas de la noche.

Si te quejaste, supongo que no te escuché. Estaba demasiado ensimismado en mis problemas para pensar en los tuyos.

Ahora pienso en todas las cosas que dejaste por mí: la ropa, las salidas, fiestas, amistades.

Nunca te quejaste y, de alguna manera, nunca recordé darte las gracias por ser tú.

Cuando me iba a jugar o con amigos, siempre hablaba de mi negocio, mis pagos. Creo que olvidé que eras mi socia aunque no estuvieras conmigo. Fueron tus apoyos morales los que lograban día con día que las cosas salieran bien.

Me sentía orgulloso de ese trabajo, de esa máquina y alardeaba. También estaba orgulloso de ti, pero nunca te lo dije. Di por hecho que lo sabías, pero si hubiera pasado tanto tiempo hablando contigo, como el que pasaba en la empresa, tal vez te lo habría dicho.

Durante todo este tiempo que hemos estado, siempre supe que tu pensamiento me acompañaba ¿y te digo algo? Me alegraba. Sin embargo, en esta ocasión no fueron suficientes.

Estoy triste y me duele, creo que recorrí mi último tramo contigo y deseo decir las cosas que debí haber dicho hace mucho tiempo. Las cosas que quedaron olvidadas, porque estaba demasiado preocupado por el negocio y el trabajo.

Pienso en las citas y los cumpleaños en que estuve ausente, en los momentos que te quedaste sola porque mi trabajo no me permitió estar.

Pienso en las noches solitarias que pasaste sola, preguntándote donde estaba y como iban las cosas. Pienso en todas las veces que pensé llamarte solo para decirte hola y que no lo hice. Pienso en la paz interior que tenía al saber que tú estabas bien después de una llamada.

Pienso en las cenas en la que dedicabas todo tu tiempo, para explicar porque yo no había podido asistir.

Yo estaba ocupado trabajando, de compras o durmiendo, porque habría trabajado durante la noche y estaba cansado. Siempre había motivos, pero ahora no me parecen muy importantes.

Cuando nos conocimos no permitía que me acompañaras al trabajo, con el tiempo te convertiste en una buena compañía, me ayudabas con tus pláticas, me sentí muy orgulloso cuando estabas conmigo ahí.

Me sentí orgulloso de ti cuando llegué a tu casa una noche y me recibiste hermosa como siempre, sin importar si eran las 12 de la noche o del medio día. Siempre te consideré una estrella de cine. Eres hermosa. Creo que no te lo dije últimamente, pero lo eres.

Cometí muchos errores en mi vida, pero si alguna vez tomé una buena decisión, fue cuando te invité a cenar la primera vez. Nunca pudiste comprender lo que me mantenía tanto tiempo en el trabajo. Yo tampoco, pero era mi forma de ganarme la vida y estuviste a mi lado. Siempre estuviste allí, en los buenos momentos y en los malos momentos.

Te amo.

Me duele el cuerpo, pero el corazón me duele aun más. No estarás aquí cuando te necesite. Por primera vez desde que estamos juntos, estoy en verdad solo y eso me atemoriza. Te necesito mucho y se que es demasiado tarde.

Supongo que resulta gracioso, pero lo que tengo ahora es mi trabajo. Este maldito trabajo que gobernó nuestras vidas durante tanto tiempo. Este pedazo de tiempo en el que estuve mucho. Sin embargo no puede devolverme el amor. Solo tú puedes hacer eso.

Te encuentras lejos de aquí, pero te siento aquí conmigo. Puedo ver tu rostro, sentir tu amor y me asusta quedarme solo.

Recuerda que siempre estarás en mi mente, como lo mejor que me ha pasado en la vida.

Creo que es todo, te amo mucho.

Cuídate y recuerda siempre que te amo más que cualquier cosa en la vida. Solo olvidé decírtelo.


"Fuego Sagrado"…

Amor que te fuiste para no volver.
Siempre estás conmigo,
aquí a mi lado.

Te veo en el agua muy clara del lago,
en los rayos dorados
del Sol que me abrasa.

En las noches claras, cuando en el cielo
todas las estrellas, entregan su luz,
y una sobre todas, parece decirme:
¡Te estoy esperando!
Más yo le respondo
que pronto será.

Mientras tanto sigo alimentando
con tu voz tan calma,
con mi amor y mi alma,
este fuego intenso, que encendió el amor.

Pero te aseguro, que mientras en el mundo
una alondra cante y florezca un jazmín
El "fuego sagrado" nunca tendrá fin,
ese fuego tuyo y mío por siempre.


Perdido en tus brazos…

Esta noche quisiera
perderme en tus brazos,
que me arropes como nunca
lo he imaginado.

Quiero escuchar tus suspiros
cuando me dices, te amo
quiero tomar la forma de tu cuerpo,
llevarte a soñar conmigo
y muy callado decirte,
¡Cuanto te deseo!
Y olvidar, todo lo que nos rodea.

Esta noche quisiera
ver a través de mis sueños
cuanto es tu amor por mí,
cuanto es mi amor por ti.

Esta noche quisiera,
que te quemes en mi hoguera que es
un volcán cuando te acercas a mí.

Tu pasión me desborda,
y me llevas hasta tu cuerpo.
Te busco incesantemente
hasta encontrar tu alma,
allí en lo más profundo
quiero llegar esta noche.

Esta noche quiero soñar,
nuestras realidades,
solo contigo quiero.

Que bello será amor,
encontrarte al final de este viaje
y que me lleves junto a ti
hasta la eternidad.

Solo tú despierta en mí,
estos pensamientos,
esta noche, quisiera
perderme, entre tus brazos.


Últimos versos…

Busqué en caídas adversas
tu reflejo en el crepúsculo.
Encontré el sabio consejo,
el beso del olvido.

Ven a mi estatua de miel y sal,
entre tus recuerdos mi angustia ha de llorar.
Mi voz uniré al lamento del viento,
surcaré en silencio las sombras del ocaso.

Intento hablarte amante distante,
surcadora de estrellas,
creadora de soles.
Quiero tocarte, robarle una sonrisa al cielo.

Intento llamarte alma lunar,
pero, el aire me ha abandonado,
al igual que la luz al despertar.
La esperanza palidecía, como una noche sin sueño.

Son los últimos latidos
que por ti nacen amor,
son los últimos suspiros
que escapan por tu dolor.

Son las últimas lágrimas
que le regalo a tu ausencia,
las últimas sonrisas
que verás en las estrellas.

Son estos los últimos versos
que te escribo
a ti, mi musa, mi amor,
mi melancolía, mi dolor.

Libero tu recuerdo al vacío,
al abandono.
Mis pulmones se secan
por el aire que cae de tu olvido.

Mis palabras se pierden con el lamento silente
del epitafio de tus risas.
Mi mente traspasa muda el abismo
y abraza a la oscuridad en un minuto eterno.

Mi alma se estrelló con el asfalto,
mis ojos atascaron el agua oscura
de la desolación,
desaparece el tiempo, te dejo escapar, recuerdo.

Mi mirada sigue el rumbo doloroso
de las gaviotas errantes al atardecer.

Te dejo ir promesa del cielo,
mientras se marchita mi esencia
en el último ocaso
de mis versos, de tu corazón, de mi poesía.

Cae en silencio mi amor,
recuéstate sobre el horizonte de mis ojos.
Se desmaya en un segundo mi pasión
y muere en la eternidad mi corazón.


Aún...

Aún sin haber visto su rostro... ya la veía con aquellos ojos que ven hasta lo invisible, que son los ojos de mi alma, mi mente y mi tierno corazón...

Aún sin haber oído su voz... amaba todo lo que ella decía...

Porque aún sin saber nada de ella... la he dejado entrar a las puertas de mi corazón y no la dejaré salir... a menos que ella lo pida...

Y sé que no lo hará... porque al igual que yo...ella me necesita tanto como yo a ella...

Porque los dos somos uno... ambos nos complementamos, tanto el uno para el otro...

Porque tú eres la flor que llena mi jardín...

Y porque no soy el mar, si ella no es el agua que me llena con su amor...

Porque yo soy el fuego, pero ella es mi calor...

Y porque yo soy el amor... pero ella es mi gran fuente de inspiración...


Eternamente mi amada…

Te veo... y la dulzura de tus ojos
aún le da alegría a mi corazón.
Y aunque sé que debo olvidarte
no puedo dejar de amarte
y atesorar cada instante
que con amor puedo mirarte.

Y es que la ternura de tu rostro
ha dejado una huella imborrable en mi corazón
y no puedo por más que lo intente
sacar tu recuerdo de mi mente
para dejar de quererte.

Porque tu esencia está en el aire que respiro
y eres tú el sol que tanto admiro,
eres por quien miro al cielo y suspiro
mi más bello anhelo
y el dulce sueño por el que deliro.

Y aunque mi dulce amor no sea correspondido
amarte por siempre te he prometido,
serás por siempre la que mi corazón ama
mi único amor y eternamente mi amada.


No existe distancia…

"Que la distancia no importa".

"Que no hay nada que saque este amor
que sentimos uno al otro",

Estas son tus palabras corazón...

También siempre me dices:
"Amor... siempre pienso en ti..."
Simples frases tan sencillas
que me hacen estremecer de la emoción.

"Que debo de tener paciencia...
que el día llegará".

"Que siempre estaremos juntos...
a pesar de que nos separa un mundo".

"Que me quieres, que me extrañas"
Y yo te amo... y pienso en ti cada mañana
cada tarde, cada noche,
cada momento de mi vida
siempre estás presente tú...

Y a pesar de estar tan lejos
yo te siento cerca mío
y en este amor que sentimos...
no existe distancia ni olvido
simplemente nos amamos
como si estuvieras conmigo

y yo contigo...


Solo y sin sueños…

Cuando te arde el pecho y te quema la sangre de dolor...
¿Cómo se sigue?

Cuando se destrozan tus ilusiones,
¿Y caen en cascada desde el corazón?
¿Cómo se hace?

Difícil creer en curarme del desamor,
difícil pensar que me van a amar...
Cuando todo lo que soy lo dejé en su mano
Y apretó su puño hasta estrangular mi vida entera.

Solo, solo quiero estar conmigo,
la desesperación supera mis propios límites
se agudiza con cada respiro
y se mezcla con el oxigeno.

Caigo al vacío desde su frente,
mirando desde ahí arriba como me desplomo en sus pies,
y aun así, burla mi amor, diciendo absurdos te amo
y fuerza su voz en gritos que aturden la paz de mi amor.

Ese amor que se quedará inmóvil del otro lado de la luna
ahí donde nadie nunca más podrá hallarlo,
dormido... pero sin sueños.


Ya no me basta…

Ya no me bastan tus besos
muy temprano en la mañana,
ya no me basta abrazarte
unos minutos con calma,
ya no me basta mirarte
de reojo cuando me hablas.

No... Ya nada de eso me basta.

Quiero saberte muy mía
que soy solo yo quien te ama,
que no hay nadie más en tu mente,
que en tu corazón soy quien manda,
que solo quieres tenerme,
que no piensas en más nada
que mis besos son el río
que calma la sed de tu alma,
que mi cuerpo es todo tuyo
aunque me sientas lejano
que mi corazón suspira
por estar a ti abrazado
sentir tus manos ardientes
acariciarme con ganas.

Oh... Santo Dios que me has hecho
que me tienes tan desquiciado.

Te amo tanto amor mío
que yo sin ti no soy nada.


Si fueras mía…

Si pudiera deslizarme por el cielo
una estrella de brillante te traería,
y para adornar tu cabellera
de diadema el arco iris te daría.

Si tu fueras mi reina
tu esclavo fiel sería
y postrado a tus pies,
yo mil besos te daría.

Si yo pudiera pasearte por el cielo
entre mis brazos yo te llevaría,
formaría un lecho de luceros
y allí te imploraría fueras mía.

Si tú fueras mía
sería linda fantasía
y en coro las estrellas
una canción de amor entonarían.

Si un día sucediera, reina mía
que mi sueño fuera realidad,
lucharía con todita mi alma
para darte toda la felicidad.

Si algún día fueras mía,
mi corazón yo te daría
y entre risas de alegría
tú serías mi linda fantasía.


Desnuda amazona…

Me gusta pensarte, desnuda amazona,
cabalgando una lluvia que cae del suelo al cielo,
en los viajes que se repiten interminables
mientras inundas tu misteriosa oscuridad.

Me gusta saber que provocas
un nido de mariposas
que nublas mi cara sembrando raíces
en los suspiros que anuncian
dulces agonías.

Tengo que hablar y decirle
al viejo puente cerca del mar
que sueño con esa gaviota que pesca el amor
y descansa mojada esperando
que pase el amanecer.

Espero el tiempo de vivir
en las horas que sudan el olor de tu carne
y dejar libre la tentación
de sentirte, besarte y amarte
en los hemisferios
que descubiertos a mordiscos y besos
me dibujarán el camino al sur
donde lloverá al compás de mi deseo.


Niegas y lastimas…

Tus ojos discretos
me susurran que me amas,
tus palabras me lastiman
robándome la calma.

Tus caricias tímidas
que niegas que existieron,
quedaron en mi piel
y todavía las recuerdo.

Tus palabras continúan
como un eco en mi mente,
se repiten, me confunden
no conozco lo que sientes.

Cierro mis ojos
me invaden recuerdos,
me inundan palabras
me lleno de sueños.

Los segundos duran horas
las semanas, segundos,
el tiempo ya no pasa
ni tampoco gira el mundo.

El cielo ya no siente,
el mar ya no respira,
el desierto no descansa,
todo el mundo nos mira.

Me robaron las noches,
me encuentro sin sonrisas,
ni siquiera tengo lágrimas
estoy herido y de rodillas.


Carta de amor a KEAM: La casa de las flores…

Recuerdas? Te conocí un día en que los dos buscábamos lo mismo: una mirada nueva que nos mirase, una presencia nueva donde enredar ilusiones perdidas. Me regalaste una foto y te comenté que tenías cara de cabrachica demasiado seria, de persona que siempre se ajustó al guión, de quien nunca se espera que falle.

Y así comenzó todo: con unos mismos deseos y una foto que yo coloqué en un rincón de mi computador, junto a una carpeta llena de flores virtuales. La nuestra fue una aproximación lenta, de correos casi diarios, un paso a paso sin demasiados convencimientos, un querer pero no decidir...

Muy despacio llegaron tus confesiones: un marido que había olvidado navegar en tus ojos, un cyber amor que te abandonó sin decir adiós, un hombre que te llama con frecuencia por teléfono desde muy lejos... Llegaron fotos nuevas y así descubrí que tenías un cuerpo menudo y agradable, un cálido refugio donde anidar nuevos deseos.

A veces, mientras pensaba en ti, miraba tus fotos con curiosidad. ¿Eran aquellos ojos donde yo navegaría algún día?, ¿Eran aquellos brazos los que me abrazarían?, ¿Eran los pechos tiernos que buscarían mis caricias?, ¿Eran el vientre y los muslos que acogerían mis deseos?

Así llegaron nuestras primeras citas, encuentros breves con el tiempo justo para tomar algo y tratar de asegurarnos de que éramos quienes decíamos ser. Pasaron los meses despacio, sin sobresaltos, un tiempo lento en el que íbamos construyendo un espacio para nosotros.

Un día, cuando miraba tus fotos, me di cuenta que la carpeta de flores se había abierto sola y unas cuantas se asomaban y se paseaban por la pantalla del computador.

Desde entonces, me las encontraba en cualquier parte en cuanto encendía el aparato. Surgían en cualquier rincón cuando trataba de leer el periódico digital, se metían en los correos que escribía a los amigos, se colaban en los programas que utilizaba en el trabajo, aparecían al abrir cualquier archivo...

Mientras trataba de hilvanar contigo conversaciones inacabadas en el Messenger, las flores de deslizaban fuera de su carpeta llenando todos los archivos abiertos, ocultaban el puntero del ratón e inundaban la ventana de conversación.

Yo te contaba cómo aumentaba mi amor y las flores se multiplicaban; te escribía cómo aumentaba mi deseo y las flores me miraban desde todos los rincones de la pantalla; te decía como suspiro por tu labios y las flores formaban una cortina de colores; escribía cuánto te echo de menos y un arco iris de flores iluminaba mis letras...

Un día, mientras trataba de escribirte pálidas líneas donde reflejar lo que te quiero, una luz intensa iluminó la habitación y me cegó por completo. El computador pareció cobrar vida y comenzó a escupir flores de todas las clases, flores reales, flores de todos los tamaños y colores.

Flores que se metieron en todos los muebles de mi oficina, atestaron los cajones, tapizaron las paredes, cubrieron las cortinas y los visillos de las ventanas, inundaron armarios metiéndose en los bolsillos de las ropas y entre las hojas y los lápices, se deslizaron por los enchufes provocando cortocircuitos, se metieron en las cañerías, se desparramaron en la cocina llenando el frigorífico y reventando la vajilla, ocultaron bajo un manto las puertas de toda la oficina...

Una lluvia de pétalos de todos los colores se abatió sobre el edificio entero, cubriendo el tejado y los patios de luz, dejando un perfume intenso que podía percibirse al otro extremo de la ciudad…era Channel n.5. Cuando aquel destello de luz desapareció me encontré solo, en medio de un océano de flores que olían a ti.


BUENAS NOCHES A TODOS